La industria del poder Y su maquina del miedo Que extermina personas y suenos No descansara hasta verte En la miseria mental Haciendo de lo trivial Un
En las entranas cancerosas De esta enorme ciudad Camino y trato de escapar De su violencia latente Sintiendo la soledad De miles de hombres solos Que
[Instrumental]
[A. Zamarbide ? M. Roldan] Si al malo lo hacen bueno, y vuelven santo al homicida. Si importan mas las armas que lo que importan nuestras vidas. Si
escuchando las voces que quieren marcarte el camino en un mundo sano y devastado tus pisadas van quedando en el pantano del fatal olvido No se calma
Tu identidad es la que tiene que salvarse Del consumo que aturde la conciencia Con la presion radial que incide con sus voces Para que mueras en el dial
Cae la noche Una vez mas Luces te ciegan Y no te dejan mirar Ya vas camino A la seccional Suenos de espadas Y serpientes te atormentan Todos te quieren
Gritos de nuestro pasado vienen A encendernos nuevamente Degollando burlones fantasmas Que quieren enmudecernos Vamos griten ya! La victoria es nuestra
[M. Roldan] Si no entiendes la realidad sera porque nunca nadie en la vida te enseno tal vez a mirar del otro lado del cielo. La gente va resignandose
[A. Zamarbide] No temas ver las sobras del ayer ni espanto que hirieron alguna vez, aun si los cielos vieras descender, y tengas suenos postergados aun
En el mundo de las redes Las maquinarias perdidas No cesan de fabricar ordenes la lentitud ya no existe Cien mil operaciones por segundo Y los segundos
Nuestro enemigo levanta su ejercito Proselitistas de la desunion Robando siempre palabras del viento Que otros heredan sin reflexion Vos, yo, libres
Quien no sufrio presion sintiendo Que sus miedos lo estan siguiendo Cuando estan desafiando a tu alma Con frases que en el ser sin cesar batallan Quien
Avanza siempre sin cesar Y nunca llega Errante en la oscuridad Buscando restos del amor Que se ha perdido Camina hoy la humanidad Sin saber a donde va
[M. Roldan] Bajo un manto de oscuridad que hoy envuelve a la humanidad, ya no existe quien pueda ofrecer ni un vestigio de amor y lucha. Debes correr